Las Médulas tienen una historia fascinante que se remonta a la época romana, cuando fueron el principal yacimiento de oro del Imperio. Los romanos emplearon una técnica innovadora llamada "ruina montium" para extraer el preciado metal, dejando un paisaje de colinas esculpidas de manera única.
El impacto ambiental de esta actividad fue significativo, alterando irreversiblemente la topografía original. Sin embargo, con el paso de los siglos, la naturaleza ha reclamado parte de este espacio, creando una fusión única entre la intervención humana y la regeneración natural.
Hoy en día, las Médulas son un tesoro para la provincia de León. No solo por su valor histórico y arqueológico, sino también por la belleza de sus paisajes, que atraen a turistas y amantes de la naturaleza. Este equilibrio entre historia, ecología y turismo convierte a las Médulas en un testimonio vivo de la capacidad de la naturaleza para recuperarse y transformar antiguos sitios de extracción en verdaderos tesoros culturales y naturales.